La celebración de la XVIII Copa Mundial propició una serie de eventos culturales, aprovechando la importante plataforma mediática que aportaba el torneo, en Alemania como fuera del país, principalmente a través del Goethe-Institut, que realizó exposiciones de la historia del fútbol en 127 países. De hecho, el Comité Organizador de la Copa Mundial de Fútbol de 2010 anunció que repetirá la experiencia. Diversas obras de arte se instalaron en Alemania en conmemoración del evento, como el Fußball Globus, una instalación móvil con forma de balón que recorrió las 12 ciudades sedes y en la que se realizaron encuentros de poesía, reuniones de literatura y foros de discusión.
