Suele ser imposible saber de dónde procede una píldora adulterada concreta, pero, según un informe bipartidista del Congreso publicado el año pasado, los cárteles de la droga mexicanos son la fuente de muchas de ellas. “Me imagino que son muchas más, pero es imposible decir cuántas”. El habitual rojo para el elenco de la capital se combina con el amarillo en el cuello y los bordes de las mangas dónde se forma un efecto de rayo inspirado en el dios romano Júpiter que también sirve de concepto para el suplente blanco.
